
Uruguay despide a José Mujica con honores
Uruguay rinde homenaje a José Mujica con un cortejo multitudinario, visitas oficiales y un velatorio que continúa este jueves en el Palacio Legislativo.

Miles de uruguayos tomaron las calles de Montevideo para despedir al expresidente José "Pepe" Mujica, fallecido el martes a los 89 años. El cortejo fúnebre partió desde la Torre Ejecutiva, sede del Gobierno, y recorrió lugares emblemáticos de su trayectoria política como el Frente Amplio, el Movimiento de Participación Popular y el Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros. El recorrido culminó frente al Parlamento, donde se instaló una capilla ardiente para recibir a ciudadanos, líderes políticos y figuras internacionales.
El féretro, cubierto con la bandera de Uruguay y el pabellón de José Artigas, fue escoltado hasta el Salón de los Pasos Perdidos por autoridades y familiares. La viuda de Mujica, Lucía Topolansky, recibió conmovida el saludo de líderes como Yamandú Orsi, actual presidente uruguayo, y el expresidente Luis Lacalle Pou, quien destacó la capacidad de Mujica para unir sectores opuestos en momentos clave de la democracia. La despedida continuará este jueves, cuando se espera la llegada de Luiz Inácio Lula da Silva y Gabriel Boric, presidentes de Brasil y Chile, respectivamente.
José Mujica fue una figura reconocida por su vida austera, su estilo directo y su enfoque en la justicia social. Gobernó Uruguay entre 2010 y 2015, y se convirtió en un símbolo internacional de coherencia política y cercanía con el pueblo. Desde Pekín, Lula da Silva lamentó su muerte con palabras sentidas: “La carne se va, pero las ideas se quedan”. La admiración por Mujica traspasó fronteras, reflejada en las miles de personas que hicieron fila para despedirlo en el Parlamento.
Últimos deseos y homenajes
El velatorio continuará abierto al público hasta la madrugada del jueves, momento en que se hará una pausa para reabrir horas más tarde. El funeral concluirá con una ceremonia privada en la que sus restos serán cremados. Según su voluntad, las cenizas se depositarán en su finca de Rincón del Cerro, donde vivió durante décadas y murió tras luchar más de un año contra un cáncer de esófago. El Gobierno de Orsi declaró tres días de duelo nacional.
Más allá de los actos protocolares, la despedida a Mujica ha sido un reflejo del afecto popular hacia un político que marcó generaciones. Sus discursos, su vida sin lujos y su defensa constante de los valores democráticos lo convirtieron en una figura única en América Latina. Hoy, Uruguay lo despide con gratitud, mientras sus ideas y legado siguen resonando dentro y fuera de sus fronteras.