Doble celebración mundial: Día de la arquitectura y del hábitat

En el primer lunes de octubre, una singular confluencia de celebraciones toma el escenario global: el Día Mundial de la Arquitectura y el Día Mundial del Hábitat. 

Esta alineación no es casualidad, sino un resultado de la decisión tomada en 1996 por la Unión Internacional de Arquitectos (UIA), que unió estos dos eventos para destacar la importancia de la arquitectura en el desarrollo urbano sostenible, una visión propuesta por la comisión de hábitat de la ONU en 1985.

Fomentar la reflexión sobre el estado actual de nuestras ciudades y el derecho fundamental de todos a una vivienda digna, es el propósito detrás de esta fecha.

En los últimos años, los Días de la Arquitectura y del Hábitat han puesto sobre la mesa la problemática del déficit habitacional en todo el mundo. Los expertos coinciden en la importancia de cumplir con el objetivo número 11 de la Agenda de Desarrollo Sostenible de la ONU para 2030. Este objetivo se centra en la creación de ciudades seguras, inclusivas y sostenibles.

De acuerdo a la ONU, se proyecta que para 2030, aproximadamente el 40% de la población mundial necesitará acceso a una vivienda adecuada. Esto implica la necesidad de una planificación minuciosa de los servicios públicos para evitar la sobrecarga y el colapso.

La celebración de estos dos días, además de honrar la arquitectura como disciplina, destaca su función esencial en la creación de entornos habitables y sostenibles. La unión de estas dos fechas nos recuerda que la arquitectura no es solo una cuestión estética y de arte, sino un factor crítico en la promoción del bienestar humano.