Uno de cada tres estudiantes es víctima de acoso escolar según Unesco
Como consecuencia, se pone en riesgo la continuidad de los estudios, puesto que un entorno escolar inseguro se relaciona a un menor rendimiento académico.
El inicio de clases escolares en países latinoamericanos, como en cualquier región del mundo, puede significar una de las experiencias más agradables para los menores del hogar; sin embargo, esto puede verse opacado fácilmente por el ascoso escolar o bullying. En ese sentido, uno de cada tres estudiantes (32%) en todo el mundo fue víctima de acoso en la escuela (entre el 2001 y 2017), según un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
De acuerdo a lo informado por estudiantes, la apariencia física (15.3%) es una de las razones más frecuentes para sufrir acoso escolar, seguida de la raza, la nacionalidad o color de la piel (10.9%). El estudio realizado destaca que los estudiantes migrantes son más propensos a sufrir acoso que sus compañeros nativos, con un 33% frente a un 26.3%.
Además, la data indica que, en general, los niños (21.5%) son más vulnerables a sufrir acoso físico que las niñas (10.1%), mientras ellas (6.1%) tienen una probabilidad ligeramente mayor que ellos (4.7%) de sufrir acoso psicológico durante su etapa escolar.
A su vez, de acuerdo con el informe, estudiantes a quienes catalogan como “no conformes con las normas de género” corren un mayor riesgo de bullying en las instituciones escolares. Esto incorpora a “estudiantes que son (o se perciben como) LGBT”, como a quienes que no se sienten identificados con los estereotipos de masculinidad y feminidad.
Sufrir acoso trae como consecuencia interrumpir la continuidad de los estudios, puesto que un entorno escolar inseguro se relaciona a un menor rendimiento académico. En cuanto al ámbito de salud, el acoso escolar guarda un estrecho vínculo con altos niveles de soledad y pensamientos suicidas, así como a tasas más elevadas de consumo de tabaco, alcohol y cannabis.
Por último, el informe destaca la importancia del apoyo y la comunicación familiar como factores protectores fundamentales. Según varias encuestas examinadas, los niños que reciben mayor apoyo y mantienen una buena comunicación familiar presentan menos probabilidades de sufrir acoso escolar o ejercerlo ellos mismos.