
Elon Musk y Trump enfrentan ola de violencia contra Tesla
Donald Trump calificó como "terroristas" a los responsables de ataques contra Tesla y sugirió que cumplan su condena en cárceles de El Salvador.

La escalada de ataques contra instalaciones y vehículos de Tesla en distintas ciudades de Estados Unidos ha generado una respuesta contundente del expresidente Donald Trump. El exmandatario instó a que los responsables sean condenados a 20 años de prisión, calificándolos como "terroristas" y sugiriendo que purguen su pena en cárceles de El Salvador, conocidas por sus estrictas condiciones.
Trump se refirió a los acusados como "matones terroristas enfermos" luego de que la Fiscalía General de Estados Unidos presentara cargos contra tres individuos por presuntamente lanzar artefactos incendiarios en estaciones de carga y concesionarios de Tesla en Colorado, Oregón y Carolina del Sur. Según el Departamento de Justicia, los detenidos se enfrentarán a penas de entre cinco y 20 años de prisión.
Estos ataques ocurren en un contexto de creciente tensión política y empresarial. La cercanía de Elon Musk con Trump ha generado reacciones divididas, especialmente tras la designación del magnate como líder del Departamento de Eficiencia Gubernamental, encargado de reducir el gasto público. La vinculación entre ambos ha llevado a un boicot contra Tesla, además de incidentes de vandalismo.
Uno de los acusados fue arrestado tras incendiar vehículos en un concesionario en Oregón, mientras que otro intentó provocar daños similares en Colorado. Un tercer sospechoso fue detenido en Carolina del Sur tras mensajes pintados contra Trump en estaciones de carga de Tesla antes de prenderles fuego con cócteles molotov. Las autoridades han advertido que tomarán medidas enérgicas contra este tipo de ataques.
Desde la Casa Blanca, la portavoz Karoline Leavitt condenó la violencia, asegurando que Tesla era una marca admirada en Estados Unidos hasta que Elon Musk manifestó públicamente su apoyo a Trump. La administración ha calificado estos ataques como parte de una ola de "terrorismo interno" y ha enfatizado su compromiso con la seguridad de las empresas y ciudadanos afectados.
Mientras Tesla enfrenta caídas en la bolsa y boicots, Trump ha reafirmado su respaldo a Musk, e incluso llegó a convertir temporalmente la Casa Blanca en un concesionario improvisado para promover la marca. Sin embargo, los ataques contra la empresa sugieren que la polarización en torno a Musk y su relación con Trump sigue escalando.
