
Estados Unidos reanuda la deportación de migrantes venezolanos
Estados Unidos retomó los vuelos de deportación de migrantes venezolanos indocumentados, pero el régimen de Maduro y Washington intercambian acusaciones sobre el acuerdo migratorio.

Un avión de la aerolínea estatal Conviasa aterrizó en la madrugada del lunes en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía con 199 ciudadanos venezolanos deportados desde Estados Unidos, reactivando un programa de repatriación que estuvo suspendido desde febrero. La medida se enmarca en el acuerdo migratorio entre Caracas y Washington, aunque las relaciones entre ambos gobiernos siguen marcadas por la desconfianza y las acusaciones mutuas.
Desde la terminal aérea, el ministro del Interior y Justicia, Diosdado Cabello, declaró que el gobierno está dispuesto a recibir a todos los venezolanos que regresen al país. Además, señaló que la baja frecuencia de los vuelos responde a factores externos y no a decisiones del régimen de Nicolás Maduro. El operativo se suma a vuelos anteriores provenientes de El Paso, Texas, y Guantánamo, Cuba, vía Honduras.
Las repatriaciones estuvieron detenidas debido a un deterioro en las relaciones diplomáticas. Mientras el régimen venezolano acusó a Estados Unidos de obstaculizar los vuelos, Washington respondió con la revocación de la licencia de operación de Chevron en Venezuela. La tensión se intensificó luego de la deportación de 238 venezolanos a El Salvador, a quienes el gobierno estadounidense vincula con la organización delictiva Tren de Aragua.
El Departamento de Seguridad Nacional confirmó la reanudación de los vuelos y señaló que continuará con las deportaciones de venezolanos indocumentados. En un comunicado oficial, agradeció al gobierno de Honduras por su cooperación en el proceso y aseguró que el procedimiento se realizó de manera ordenada y segura. Sin embargo, no especificó la frecuencia con la que se seguirán ejecutando estos vuelos.
El régimen de Maduro denunció la deportación de ciudadanos venezolanos como una estrategia de criminalización por parte de Estados Unidos. Asegura que Washington no ha presentado pruebas contundentes sobre la supuesta vinculación de los deportados con el Tren de Aragua. Mientras tanto, organizaciones internacionales siguen observando con atención el manejo de los derechos humanos en estos procesos.
El restablecimiento de estos vuelos ocurre en un contexto de alta tensión diplomática y de cara a las próximas elecciones en Venezuela, cuya transparencia ha sido cuestionada por la oposición y la comunidad internacional. Las deportaciones masivas podrían convertirse en un nuevo punto de conflicto entre ambos países, mientras miles de venezolanos continúan migrando en busca de mejores condiciones de vida.
