La NASA avanza hacia la Luna con energía nuclear
El proyecto FSP busca proporcionar una fuente de energía robusta y duradera para futuras misiones espaciales con un sistema nuclear autónomo.
En el escenario competitivo entre China y Estados Unidos, la NASA ha revelado sus planes de crear un reactor de fisión nuclear para abastecer de energía sus futuras bases lunares y, eventualmente, explorar otros confines del sistema solar, un giro estratégico que podría cambiar el juego en la carrera espacial.
La agencia espacial estadounidense está revolucionando sus fuentes de energía para misiones lunares sostenibles con el proyecto Fission Surface Power (FSP). Este innovador proyecto busca proporcionar una fuente de energía robusta y duradera, superando las limitaciones de las placas solares en las extensas noches lunares. La eficacia de la energía nuclear, además de su fiabilidad, se erige como la clave para mantener operativas las misiones espaciales de forma continua.
En la primera fase del FSP, empresas especializadas como Lockheed Martin, Westinghouse e IX han recibido contratos para desarrollar diseños preliminares del reactor y sistemas asociados. Con requisitos estrictos, el reactor debe tener una vida útil mínima de diez años sin intervención humana, pesar menos de seis toneladas y generar 40 kilovatios de potencia. La posibilidad de un sistema nuclear autónomo durante una década abre la puerta a una nueva era en la colonización espacial y el viaje interplanetario.
Este enfoque nuclear no solo es una respuesta a la necesidad de energía en la Luna, sino que también representa una innovación tecnológica con potencial para el futuro de la exploración espacial. La NASA proyecta que, para 2025, se conocerán los resultados de la segunda fase del programa FSP, marcando un hito crucial para determinar la eficacia de esta nueva fuente de energía.