
Rusia y Ucrania retoman negociaciones directas en Estambul
Tras un ataque ucraniano contra bases aéreas en territorio ruso, delegaciones de ambos países se reunieron en Turquía. Aunque acordaron nuevos intercambios de prisioneros, las posturas siguen enfrentadas y el Kremlin rechazó un alto el fuego incondicional.

Rusia y Ucrania celebraron una segunda ronda de negociaciones directas en Estambul este lunes, en medio de un clima de tensión tras un ataque ucraniano con drones contra bases aéreas rusas, que habría dañado decenas de aviones estratégicos. A pesar del simbolismo del encuentro —celebrado en el histórico Palacio de Çırağan— y de los esfuerzos diplomáticos de Turquía y Estados Unidos, las conversaciones no lograron acercar a las partes a un acuerdo duradero.
Las delegaciones abordaron temas humanitarios, logrando consensos parciales, como el intercambio de prisioneros jóvenes o heridos y la repatriación de 12.000 cuerpos de soldados caídos en combate. Ucrania también presentó una lista con cientos de niños que, asegura, fueron deportados por Rusia desde el inicio del conflicto.
No obstante, las diferencias sobre el alto el fuego se mantuvieron. Kiev exige un cese completo e incondicional de las hostilidades, mientras que Moscú propuso un alto al fuego limitado de 2 a 3 días en ciertas zonas del frente, iniciativa rechazada por Ucrania.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, reiteró su disposición a avanzar hacia la paz, pero dejó claro que no se debe recompensar al Kremlin por la invasión iniciada en 2022. También solicitó endurecer las sanciones contra Rusia, en particular sobre sus exportaciones energéticas, y planteó nuevamente la necesidad de una reunión directa con Vladimir Putin, propuesta que Moscú sigue descartando.
El jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, mantuvo comunicación con su homólogo estadounidense, Marco Rubio, antes del encuentro, mientras que Turquía propuso una eventual cumbre trilateral con Putin, Zelenski y Donald Trump.
Ambas partes acordaron continuar el diálogo en una nueva ronda entre el 20 y el 30 de junio. Aunque sin avances sustanciales en lo político o militar, el hecho de mantener abiertos los canales de comunicación es visto como un paso necesario en la búsqueda de una salida al conflicto más devastador en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
