Tormentas tropicales que se transforman en huracanes desafían las predicciones

En un giro desconcertante para la comunidad meteorológica, las tormentas tropicales que se transforman en huracanes en cuestión de horas han sido objeto de estudio en un reciente informe publicado en la revista Monthly Weather Review. Este fenómeno impredecible ha desafiado la comprensión convencional y ha dejado perplejos a los pronosticadores, quienes se esfuerzan por anticipar estos eventos que representan una amenaza particularmente aterradora para las comunidades afectadas.

Descubrimientos clave: dos modos de intensificación rápida

El estudio, liderado por especialistas del Centro Nacional de Investigación Atmosférica (NCAR) de la Fundación Nacional de Ciencias de Estados Unidos (NSF), identificó dos modos completamente diferentes de intensificación rápida en tormentas tropicales. Estos modos desafían la noción convencional de un único mecanismo detrás de este fenómeno, lo que ha complicado los esfuerzos de pronóstico.

Modo Maratón: este modo simétrico de intensificación se produce cuando un huracán se fortalece de manera uniforme, impulsado por condiciones ambientales favorables como aguas superficiales cálidas y baja cizalladura del viento. Ejemplos notables de este modo incluyen huracanes históricos como Andrew, Katrina y María. La investigación reveló que incluso en este modo, la intensificación puede ocurrir a ritmos inusualmente rápidos, como en el caso del huracán Otis, que aumentó su velocidad en 177 km/h en solo 24 horas.

Modo Sprint: contrario a las expectativas, este modo de intensificación rápida ocurre en condiciones desfavorables, como vientos compensatorios en los niveles superiores que cortan la tormenta. Se caracteriza por una intensificación extremadamente rápida, aunque generalmente no alcanza niveles destructivos. Este modo se relaciona con ráfagas explosivas de tormentas eléctricas que provocan una reorganización del ciclón y el surgimiento de un nuevo centro.

Descubrimiento revolucionario: múltiples mecanismos en acción

El hallazgo revolucionario se produjo durante una simulación por computadora de alta resolución de 40 días de la atmósfera global, utilizando el modelo de predicción a través de escalas (MPAS) basado en NCAR. Este enfoque permitió identificar la existencia de ambos modos de intensificación rápida, que antes no se habían evidenciado en simulaciones anteriores. La conclusión principal es que los dos modos pueden representar extremos opuestos de un espectro, y muchos casos se encuentran en algún punto intermedio.

Perspectivas futuras y avertencia para pronosticadores

El autor principal del estudio, Falko Judt, científico del Centro Nacional de Investigación Atmosférica, señala que, aunque la intensificación rápida puede ser aleatoria, los pronosticadores deben ser conscientes de su ocurrencia incluso en condiciones desfavorables. El desafío futuro será comprender por qué algunas tormentas intensifican rápidamente en ambientes no propicios, mientras que otras no lo hacen.

Este descubrimiento podría ser un paso crucial hacia una mejor comprensión y predicción de estos eventos peligrosos que afectan a comunidades costeras en todo el mundo. La investigación destaca la importancia de la continua exploración científica para mejorar la capacidad de anticipar y responder a fenómenos meteorológicos extremos.