
Rusia y Ucrania realizan nuevo canje de prisioneros
Rusia y Ucrania reanudan el intercambio de prisioneros bajo un acuerdo parcial mientras crecen las tensiones por cuerpos no devueltos y una ofensiva cuestionada.

Rusia y Ucrania concretaron un segundo intercambio de prisioneros de guerra, en cumplimiento del acuerdo alcanzado en la segunda ronda de negociaciones celebrada en Estambul. El Ministerio de Defensa ruso confirmó que el canje incluye principalmente a soldados heridos, enfermos graves y militares menores de 25 años, aunque no precisó la cantidad exacta de personas involucradas.
El proceso, que se desarrolla bajo la fórmula de “todos por todos”, se extenderá en los próximos días con el objetivo de liberar al menos mil soldados por cada bando. Las autoridades ucranianas reconocieron la complejidad del proceso y señalaron que, hasta ahora, no han recibido de Rusia la lista completa de los prisioneros acordados, mientras que Moscú informó que los soldados rusos liberados se encuentran en Bielorrusia, recibiendo atención médica y psicológica antes de ser trasladados a Rusia.
Este nuevo paso en el intercambio de prisioneros ocurre en medio de un conflicto paralelo sobre la devolución de cuerpos de soldados ucranianos caídos en combate. Kiev acusa a Moscú de obstaculizar el proceso, mientras que Rusia señala que Ucrania ha postergado la entrega de más de seis mil cadáveres, situación que ha generado fuertes declaraciones cruzadas entre ambos gobiernos.
La tensión se acentuó tras una ofensiva aérea sin precedentes lanzada por Rusia el lunes, con 499 ataques mediante drones y misiles. Ucrania afirmó haber neutralizado o derribado 479 de estos proyectiles, mientras expertos estiman que Rusia produce miles de drones y señuelos mensualmente, usados para saturar los sistemas de defensa aérea ucranianos.
A su vez, crecen las dudas sobre una presunta ofensiva rusa en la región ucraniana de Dnipropetrovsk. Aunque el Ministerio de Defensa ruso afirmó haber avanzado en esa zona, Kiev lo niega categóricamente. Análisis independientes confirmaron que tropas rusas ingresaron algunos metros al territorio, aunque aún no existen evidencias de una ofensiva a gran escala.