Tensiones entre Venezuela y Guyana por el territorio Esequibo
Esequibo es un lugar valioso en recursos naturales, lo que ha causado un conflicto territorial entre Venezuela y Guyana por sus reservas de crudo
Esequibo, una extensión territorial repleta de valiosos recursos naturales, en especial petróleo y carbón, ha sido escenario de un prolongado conflicto entre Venezuela y Guyana que se intensificó a partir de 2015 y ahora se adentra en una nueva fase.
Venezuela ha anunciado la convocatoria de un referendo para el 3 de diciembre, en el cual se consultará a los ciudadanos sobre la creación de una nueva provincia denominada "Guayana Esequiba" en esta región de 160,000 km2 con abundantes recursos naturales, así como la concesión de la nacionalidad a sus 125,000 habitantes.
La consulta ha generado fuertes tensiones diplomáticas, siendo repudiada por Georgetown, que aboga por resolver el conflicto en la Corte Interamericana de Justicia (CIJ), opción desestimada por Venezuela, que prefiere la vía de la negociación.
El Esequibo, actualmente administrado por Guyana, se basa en un laudo de 1899 en París que Venezuela no reconoce. Con vastas reservas de crudo, Guyana lanzó licitaciones en diciembre de 2022 para explotar 11 bloques de yacimientos petroleros, consolidándose como el país con las mayores reservas per cápita del mundo. En septiembre de 2023, anunciaron nuevas licitaciones en la región, provocando la protesta de Venezuela, que alega que las aguas están en disputa.
Guyana, desafiante, ha otorgado permisos de perforación a empresas extranjeras, incluso en áreas reclamadas por Venezuela. La respuesta de Caracas fue rechazar enérgicamente esta "ronda ilegal de licitación", generando un conflicto que eleva la tensión entre ambas naciones.
Venezuela llevó a cabo un simulacro exitoso del referendo sobre el Esequibo, generando alta participación y sin problemas técnicos aparentes. Las autoridades guyanesas consideran esta consulta una violación de las leyes internacionales y una amenaza para la paz en la región. A pesar de los llamados a la sensatez, la disputa persiste, y la CIJ se prepara para abordar este conflicto territorial centenario en las audiencias programadas en La Haya.