
Detienen en Minnesota al presunto atacante de legisladores estatales
El sospechoso, Vance Boelter, habría planeado el crimen con antelación y contaba con una lista de 70 objetivos políticos.

Tras una intensa operación de búsqueda que movilizó a más de 100 agentes, las autoridades de Minnesota lograron la detención de Vance Boelter, de 57 años, señalado como el principal sospechoso del ataque armado que dejó dos muertos y dos heridos entre figuras de la política estatal. La aprehensión tuvo lugar el domingo por la noche en una zona no revelada dentro del estado, culminando así un operativo que incluyó unidades SWAT y alertas de emergencia en distintas comunidades rurales.
Boelter es acusado de irrumpir el sábado pasado, disfrazado de policía, en la residencia de Melissa y Mark Hortman, quienes fueron asesinados en su domicilio de Brooklyn Park. Minutos después, el atacante se dirigió a la casa del senador estatal John Hoffman y su esposa, Yvette, en Champlin, donde ambos resultaron gravemente heridos por múltiples disparos. A pesar de las lesiones, ambos sobrevivieron y se recuperan tras varias cirugías.
Durante la investigación, se halló en el vehículo del sospechoso una libreta con cerca de 70 nombres, entre los que se encontraban legisladores estatales, activistas y defensores del derecho al aborto. Aunque inicialmente se pensó que el documento era un manifiesto político, la policía aclaró que se trataba de apuntes confusos, sin una motivación ideológica claramente definida. También se encontraron armas tipo AK, un sombrero vaquero y panfletos del grupo radical “No Kings”.
Boelter, quien en el pasado fue designado por el gobernador de Minnesota a una junta estatal, había trabajado como director de patrullas de seguridad y viajado por el mundo predicando su fe cristiana. A pesar de no tener antecedentes penales relevantes, sus discursos religiosos incluían críticas hacia los derechos LGBTQ y un tono moralista. Amigos y colegas aseguraron estar sorprendidos por los hechos, describiéndolo como alguien entregado a su religión y ajeno a actos de violencia.
Las autoridades han presentado cargos de homicidio e intento de homicidio contra Boelter, quien podría enfrentar hasta 40 años de prisión por cada delito si es hallado culpable. Mientras tanto, se investiga el vínculo que pudiera haber existido entre el agresor y las víctimas, así como las posibles motivaciones detrás de un crimen que ha conmocionado al panorama político de Minnesota.