Interrupciones en Microsoft: causas, consecuencias y soluciones

Millones de usuarios de Microsoft enfrentan problemas críticos tras una actualización defectuosa de CrowdStrike, una plataforma de ciberseguridad. Esta falla está generando la temida "pantalla azul de la muerte" en los sistemas operativos Windows, afectando a diversas industrias y servicios esenciales.

La causa raíz del problema es una actualización incorrecta en CrowdStrike, que colabora estrechamente con Microsoft para proteger su infraestructura en la nube y los servicios de productividad. Aunque esto no se debe a un ciberataque, ha tenido un impacto significativo en empresas, incluyendo el NHS del Reino Unido y varias aerolíneas mexicanas como AeroMéxico, Volaris e Interjet.

El error está perjudicando a los usuarios de Microsoft Azure y Microsoft 365, dejando fuera a quienes usan Mac o Linux. Entre los sectores más afectados se encuentran aeropuertos internacionales como LAX, Heathrow y Frankfurt, causando retrasos y complicaciones en vuelos, con miles de pasajeros afectados globalmente.

¿Qué es CrowdStrike?

CrowdStrike es una destacada empresa de ciberseguridad que utiliza inteligencia artificial para prevenir amenazas digitales. Fundada en 2011, trabaja con Microsoft para asegurar tanto Azure como Microsoft 365, ofreciendo protección avanzada en la nube.

Soluciones propuestas por Microsoft

Para mitigar este problema, Microsoft recomienda varios pasos:

• Reiniciar dispositivos: apagar y encender el equipo varias veces. Algunos usuarios han informado la necesidad de reiniciar hasta 15 veces.
• Restaurar copias de seguridad: acceder al portal de Azure, seleccionar la máquina virtual afectada y seguir los pasos para la restauración.
• Reparar el disco del sistema: realizar un procedimiento sin conexión que incluye usar una máquina virtual de reparación para corregir errores del disco.

La actualización defectuosa de CrowdStrike ha puesto de relieve la vulnerabilidad de las interdependencias tecnológicas. Microsoft y sus socios trabajan arduamente para solucionar estos problemas, mientras los usuarios buscan restablecer sus sistemas y mitigar el impacto en sus operaciones diarias. La colaboración continua y la mejora de las prácticas de seguridad serán cruciales para evitar futuras interrupciones.