Los liberales ganan las elecciones en Groenlandia

En un giro electoral inesperado, el partido Demokraatit, de ideología independentista y centro-derecha, se alzó con la victoria en las elecciones parlamentarias de Groenlandia, obteniendo cerca del 30% de los votos. Le siguió de cerca el partido Naleraq, con aproximadamente el 25%, consolidando así la posición de los partidos independentistas en el futuro de la isla.

La histórica elección llega en un momento crucial para Groenlandia, región autónoma de Dinamarca con una ubicación estratégica en el Atlántico Norte y ricas reservas de minerales de tierras raras. La isla, con una población de 56,000 habitantes, lleva más de una década avanzando en el camino hacia la independencia, aunque aún existe debate sobre el momento y la forma en que debería concretarse.

El primer ministro Mute Bourup Egede convocó elecciones anticipadas en febrero, argumentando la necesidad de unidad ante lo que describió como "un momento grave" sin precedentes en la historia del país. Se esperaba que su partido, Inuit Ataqatigiit (IA), liderara los comicios, seguido de Siumut, que ha dominado la política groenlandesa en los últimos años. Sin embargo, IA quedó en tercer lugar con más del 21% de los votos, mientras que Siumut descendió hasta la cuarta posición con cerca del 15%.

Más allá del debate independentista, los votantes mostraron preocupación por temas como la sanidad, la educación y la preservación del patrimonio cultural, lo que explica en parte el avance de Demokraatit. "El enfoque de la independencia que se imponga dependerá en última instancia de si Demokraatit decide formar un gobierno de coalición y, en ese caso, con qué partido", señaló Dwayne Menezes, director de la Iniciativa de Investigación y Política Polar.

Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha manifestado en repetidas ocasiones su interés en Groenlandia. Recientemente, en una sesión del Congreso, declaró que estaba convencido de que Estados Unidos "conseguiría Groenlandia de una manera u otra". Estas afirmaciones han añadido un matiz geopolítico a la elección, con la creciente atención internacional sobre la isla y sus recursos naturales.

Mientras Naleraq promueve una independencia inmediata, Demokraatit aboga por un proceso más gradual. Con cuatro de los cinco principales partidos a favor de la independencia, el desafío ahora será encontrar un consenso sobre el ritmo y la estrategia para lograrla.

El resultado electoral ha redefinido el panorama político en Groenlandia, con Demokraatit liderando un posible nuevo rumbo hacia la independencia. Sin embargo, las diferencias en la velocidad y el método para alcanzarla serán determinantes en la formación del próximo gobierno y en el futuro de la isla. Con la mirada del mundo puesta sobre Groenlandia, las decisiones que se tomen en los próximos meses marcarán un antes y un después en su historia política.